jueves, 4 de junio de 2009

SOBRE LAS ELECCIONES EUROPEAS

Se acaba la campaña electoral para los comicios del próximo domingo donde se deben elegir a l@s diputad@s que deben representarnos en el Parlamento Europeo.

La verdad es que a mi se me antoja muy lejano eso del Parlamento Europeo y por desconocer que es exactamente lo que hacen, debo otorgarles el beneficio de la duda y por lo tanto creer que llevan a cabo labores de importancia y que nos afectan a tod@s.

Aunque si me pongo a pensar y caigo en las comparaciones, viendo lo que se ve en nuestro Parlamento estatal y en los autonómicos, tengo la sensación de que el Parlamento Europeo debe ser la casa del “tócame Roque”

Y aunque ciertamente he oído hablar de los fondos de Cohesión Europeos, y de las directrices comunitarias, más allá de saber que puedo viajar por toda Europa o casi, con solo mostrar mi documento nacional de identidad y que tenemos una única moneda, no tengo mayores conocimientos de lo que hacen y/o para que sirve dicho Parlamento.

Me gustaría que alguien me explicase cual es su cometido. ¿Avanzamos acaso para la utópica creación de una nación europea única, con un solo Parlamento y unas leyes que sean iguales para todos los países? Me temo que no. Somos muchos y muy diferentes como para llegar a conseguir ese sueño.

Si la memoria no me falla, lo cual por otro lado ya no sería de extrañar, al inicio de nuestra pertenencia a la UE se recortaron o se impusieron cuotas de producción de leche con el sacrificio de muchas cabezas de ganado y el cierre de no pocas explotaciones ganaderas. Se limitó la producción de aceite, etc. También en la industria se notaron los efectos de nuestro ingreso y no de forma muy positiva.

Hoy en día pese a ser “ciudadano europeo” definición rimbombante, no puedo comprar, por ejemplo, un coche en el país que yo quiera sin tener que pagar ciertos aranceles equivalentes a aquellos derechos de aduana antiguos y junto a este ejemplo podría poner muchísimos más.

Las economías siguen siendo muy diferentes y el poder adquisitivo de un español y los sueldos que percibe un trabajador aquí es muy diferente al de los ciudadanos de otros países. En algunos la balanza se inclinaría a nuestro favor, los menos, y en otros, los más, continuamos siendo inferiores.

La moneda única trajo una equiparación inicial de precios, jamás la vi en los sueldos, pese a que nuestros políticos juraron y prometieron que esto no iba a suceder y que se volcarían en detectar y sancionar a quien aprovechase la ocasión para subir los precios sin justificación. Lo cierto es que, o todo estaba justificado o bien una vez más nos engañaron.

Pues bien, como decía la principio ya se acaba la campaña electoral y yo, pensaba que tal vez a lo largo de estos días, alguna formación política me ilustraría en lo que consiste ser europeo y cuáles son las iniciativas y las propuestas que pretenden llevar a dicho Parlamento para nuestro beneficio y/o progreso.

Craso error el mio. Una vez más se ha hablado de todo menos de lo que debería hablar. En los debates que muy de pasada, también he de reconocerlo, he visto en la televisión, solo he escuchado como nos machacaban con cifras, encuestas, estadísticas sobre el pasado, pero no he escuchado ninguna propuesta de futuro.

He escuchado, eso sí, como se sacaban los trapos sucios, que si el uso de aviones que debieran ser de uso restringido para acudir a mítines políticos de partido, que si recordemos los escándalos de cierto presidente autonómico, que si yo esto, tú esto y algo más, en fin un espectáculo lamentable al que, valga la redundancia, lamentablemente empezamos a estar demasiado habituados.

Con todo, me queda la incógnita de saber si realmente vale la pena ser europeo y si haré bien en ir a votar el próximo domingo o mejor haría quedándome en casa. Votaré más por ideales que por convicción, ni siquiera por pensar en enviar lejos a algún que otro politiquillo de tres al cuarto, pues si pensase así necesitaría muchas papeletas para votar a cada uno de los que se merecen estar lejos, muy lejos y solo me permiten votar una lista, que lástima.

En fin ya me he desahogado un poco y hasta a lo mejor os he metido el "come-come" en la mente y ahora hasta tenéis dudas "europeoexistenciales". Ya veis a veces soy así de malo por no regalarme otro adjetivo, jajaja.

Un abrazo a tod@s

1 comentario:

  1. Hola MacGyver, me ha gustado mucho el análisis que has hecho en esta entrada. Yo hace ya tiempo que dejé de escuchar lo que nuestros políticos y dirigentes tienen que decirnos, de hecho, ni siquiera veo la tele. Estoy cansada de escuchar hablar y no decir nada.
    No creo que vaya a votar. En estos momentos ningún partido me convence y no me gusta votar por votar. Ojalá el panorama político pintase de otra forma pero no es así. Me siento muy decepcionada a la vez que desilusionada con la forma en la que se están tratando los problemas que tenemos la mayoría de los españoles.
    Siento ser tan pesimista pero es que ahora mismo no puedo pensar de otra forma.

    Besos

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