YA VINIERON LOS REYES Y SACO EL BISTURI PARA HABLAR DE DIOS Y SUS HIJOS.

Prometí el otro día que hasta que no pasara Reyes no largaría en el blog no sea que me castigaran y me dejaran sin regalos. Como esta mañana al levantarme me encontré una tele panorámica que parece que las pibas se te echan encima, unas babuchas amarillas y azul del Cádiz, una colonia que huele que me doy besitos yo mismo, un juego pa la play y varias cosas más; entonces ya puedo largar sin miedo a que me pongan carbón.

Ayer il Padrone Opa nos puso una noticia de unos carteles que se pondrán en unos autobuses en Barcelona diciendo que probablemente Dios no existe, lo cual dicho sea de paso pa mi que no es delictivo y que cualquiera tiene derecho a opinar como le dé la gana, diferente es lo que yo me crea y haga, porque por ejemplo en el tabaco pone que fumar mata y yo me fumo dos paquetes, también pone que fumar provoca impotencia y eso ya sí me preocupa, sobre todo desde que el otro día me dijo mi gorda que cada día la tengo más pequeña. ¡Joer tendré que pensar dejar de fumar!

Pero vamos a lo que vamos, a mí que me digan que Dios no existe me preocupa lo mismo que si a Rajoy le duelan las muelas. Que lo hagan los Grupos Ateos lo veo normal, pero que paguen dinero ya me parece una tontería y es que hacer una campaña de este tipo cuando en España tenemos la costumbre de llevar la contraria a todo, es como decir que Zapatero es un mentiroso y que Rajoy tiene una gracia que no se puede aguantar. Vamos que esta campaña bien podían habérsela ahorrado y gastarse ese dinero en dárselo a los vagabundos de Barcelona que hay un montón allí.

Los Ateos que lean esto dirán que ellos con su dinero hacen lo que les sale de sus huevos y yo les contestare que sí, pero también les diré que cuando actúan de esa manera se ponen al mismo nivel que otros, porque si se han pasado la prensa, los grupos políticos de izquierda y los movimientos anticatólicos dándole caña un montón de tiempo a la manifestación esa de las familias que se celebró en Madrid, ahora corren el riego que les ocurra lo mismo, lo que me da pie en decir que aquí cuando no la caga uno, la caga otro y claro está resultando que España se está convirtiendo en un país que apesta, con todos mis respetos.

Apesta, porque se está cogiendo la costumbre de aplicar el juego que ya comenté un día de veamos quien mea más largo.

La Iglesia católica, por ejemplo, sigue en su afán retrogrado de prohibiciones, metiéndose como antaño en cuestiones políticas (veamos cuando se dan cuenta que el poder lleva a la corrupción y eso es un pecado, mortal), defendiendo posturas y movimientos que muchas veces son radicales y obsoletos y haciendo de sus actos campañas propagandistas y más que unir está sembrando dudas y desunión en los ciudadanos. Creo que la Iglesia católica se debe preocupar de su primer problema, que no es otro que los templos cada vez están más vacíos, que dejen de señalar y prohibir y procurar que aquellos que se han ido o han roto el carnet de católico vuelva al rebaño.

Aunque no les guste a los curas, tienen que reconocer que cada vez va menos gente a misa, a las pruebas me remito; el otro día fui con mi compadre Esteban a la parroquia de mi casa porque seré el padrino de su chiquillo, (pedazo de padrino que la tocao al cabroncete, que suerte tiene el jodio) y en la misa de las siete habían diez o doce vejetes, dos matrimonios puretones y tres mariquitas que son fijas porque están en la cofradía del barrio apuntaos. Le pregunte al cura si esa era la clientela normal y me dijo que bueno que los domingos hay más, pero que esos son los fijos por la tarde. Me quede flipao, no solo por la poca gente, sino porque la iglesia no quiere mariquitas y esos son los más fijos a ellas, sobre todo los de las cofradías. (A ver si tienen cojones de echarlos).

Así que yo pienso que la Iglesia católica debe dejarse ya de decir que si la eutanasia, que si los condones, que si el aborto, que si los homosexuales, porque los que tienen que cumplir esos mandatos son los que creen que es pecado y no quieren quemarse en el infierno. Recordarlo está bien, pero dar el coñazo a cada momento resulta que termina uno hasta los mismísimos y al final como uno hace lo que le da la gana, te cabreas y te cagas en la madre que pario al que te está dando la vara; por tanto si meten a más gente en la iglesia habrá menos pecadores y quedará más sitio pa los que quieran quemarse.

Por otro lado están los que critican a la iglesia y hacen la campaña contra Dios. Yo creo que son de una corriente progresista que están equivocando el camino y que también siembran dudas con sus declaraciones en las teles y sus campañas cachondas que en muchísimas ocasiones dañan e insultan a un colectivo grande como son el de los ciudadanos imparciales, entre los que yo me encuentro y que cree que una parte importante de la educación es la fe en Dios y la aceptación de normas morales de conductas. No pueden tacharme de no gozar de la vida y de no ser libre por creer en algo. Si así me califican, están faltándome al respeto y metiéndose conmigo cuando me acusan de que por creer en Dios soy una persona débil de espíritu. Si dicen eso de mí, lo mismo me puedo cagar en to sus muertos, así que cuidadito conmigo que a las malas soy un bicho.
Por favor, dejemos de mear fuera del tiesto, que ya es muy difícil los momentos que corren para estar aquí como niños pequeños tirándonos piedras de un lado a otro.

Que la iglesia cuide de sus fieles, que haga campañas de captación de socios como hacen los equipos de futbol pero sin amedrentar y enseñar la libreta apuntando los pecados, que saque a la calle sus tropas pero para transmitir la necesidad de que seamos solidarios y tolerantes entre nosotros, que no discuta más con los políticos ni sus leyes, porque al final siempre la cagan y cuando estos quieren hacer algo al final lo hacen. (¿No se han dado cuenta que al final los políticos hacen lo que les sale de los huevos?)

Y los otros los que discuten a la Iglesia, los que rajan pero no se mojan, que de una vez empleen sus fuerzas en vez de gritar, en crear. Que esos dineros de campañas en autobuses lo empleen en cosas productivas, porque al final los anuncios servirán de cachondeo y la gente seguiremos creyendo en lo que nos dé la gana y haciendo lo que hacemos siempre, criticar y cabrearnos porque unos y otros nos tienen hasta los cojones. Y por supuesto que ellos no tienen porque hacernos dudar en lo que creemos.

Yo creo que todos somos hijos de Dios, pero como nuestros hijos unos nos salen buenos y otros no tanto y es que en todos sitios hay variedad, entre los católicos y los ateos hay mucha buena gente y gente de corazón y pacífica, pero también entre ellos hay gente beligerante y muy hija de puta que les gusta tocarnos los perniles.

Creo que ya tenemos bastante todo el año con aguantar a los políticos, con que ahora venga una guerra de creencias y ya nos acaben de joder el día. La mejor creencia es la de la concordia y respeto mutuo y el de la libertad hacia otro y su derecho a las creencias.

El otro día una amiga me dijo que en un estudio científico se ha demostrado que aquellas personas que retienen semen se les suben al cerebro y tienen trastornos de la personalidad, vamos que la cabeza no les funciona muy bien. Ante lo cual no tengo más remedio que confirmar que lo que pasa es que en España follamos poco.

Grrr ¡ay oma!