REFLEXIONES DESDE MIS ENTRAÑAS. (I)

Hace mucho tiempo que la vida me enseñó que la reflexión y la meditación personal es una base fundamental para que pueda llevar una vida lo suficientemente equilibrada para saber entender cada una de las circunstancias que se me presentan en el camino.

Siempre ha sido una lucha conmigo mismo si debía compartir con otros aquello que siento y que hace unos meses tengo la oportunidad de plasmar en un Moleskine que me regaló mi hijo por Reyes. En más de una ocasión he decidido ponerlo por aquí y compartirlo con quien guste leerlo, pero siempre por alguna fuerza que creo es “vergüenza”, me he arrepentido al instante.

Sin embargo sé que si no lo hago, quizás, solo quizás, estoy quitandole la oportunidad a los “mios” de que realmente sepan como soy capaz de llevar cada uno de los sinsabores y las alegrías que la vida me ha presentado, presenta y sin duda seguirá presentándome. También con ello al mismo tiempo devuelvo parte de la enseñanza que he recibido de otros, que como yo, decidieron ponerle a la vida un color alegre sin importarle nunca cuanto de oscuro tuviera el camino.

Por ello hoy he decidido dar el paso al frente y abrir mi “personal reflexión” de aquellas cosas mundanas, místicas, materiales y metafísicas que voy viviendo, reflexionando, preguntándome, contestándome.... son solo reflexiones personales de una persona sencilla, como soy yo.

No he estudiado filosofía, ni teología, ni ninguna ciencia paranormal que realmente de respuesta al éxito. Sin embargo puedo aseguraros que me valen para ser cada día mejor persona, más positivo, incluso cuando es negativo y que sobre todas las cosas consigo ver con más claridad la verdadera sutileza de !la aceptación!, un estado emocional y mental imprescindible para ser feliz. Simplemente cuento con los estudios que la vida misma durante estos años ha tenido a bien concederme.A eso suelen decirle "la carrera de la experiencia del incansable humilde guerrero"

No esperéis consejos, no me encuentro con la capacidad de dar consejos a nadie. Son simples vivencias personales, inquietudes diarias y deducciones que siempre me llevan a un mismo punto y que es simple y llanamente: “que el ser humano como racional que es, tiene la misma capacidad infinita de amar, sufrir y hacer feliz a los demás”.

En ningún momento, en estas reflexiones que os pondré busco el comentario, el aplauso, ni la discusión; solo pretendo abrir mi corazón, mis entrañas y mostraros a una persona que hace muchos años se sintió fracasado en la vida y hoy tiene el privilegio de decir que sé cual es mi camino y mi trabajo en esta vida y se siente un ser afortunado.

De vez en cuando os dejare alguna de mis reflexiones, no puedo deciros cada cuanto tiempo ni cuantas, porque siempre irán en consonancia con la necesidad y las ganas que tenga. Pero no dudéis que siempre serán verdaderas, personales y a veces serán duras, otras alegres y algunas probablemente hasta sin sentido, pero habrá dos cosas por las que estaré satisfecho.

Una porque seré valiente y otra porque quizás a alguien en algún momento le valga para algo bueno o le ayude a reflexionar.

Hoy solo os dejo una.

EL SENTIDO POSITIVO

Cuando me invade la melancolía, la pena y la incertidumbre cuento con dos armas poderosas que me convierte en un guerrero. Una es “la espada”, la otra “el escudo”.

La espada se llama “risa” me sirve para combatir. El escudo se llama “alegría” me sirve para protegerme de la adversidad.