Hola hijo, otro 23 de
Julio, otro año que pasa en el almanaque sin tu presencia... ya ves
como pasan de rápido nueve años de tu marcha, pero a pesar del
tiempo,que difícil se hace aún tu ausencia.
Es la una de la madrugada cuando te escribo estas letras y aun me acuerdo como si fuera ayer, dos horas y media después me llamaría tu hermano para saber tu fatal desenlace. Que cruel es el tiempo, que cruel es a veces la memoria.. aunque quieras evitar ciertas recuerdos es imposible hacerles vacío, es más, cuando más débil te encuentras más daño te hace.
Mi querido Raul, sabes que cada año te pongo algo por nuestro blog para conmemorar este día que ha quedado marcado para siempre en el corazón de los que te conocimos, pero quizás por las circunstancias y los avatares de la vida este 2013 ha venido como un huracán tan fuerte como el que tocó a la familia el año pasado 2012. Pero quiero que sepas, porque lo sabes, que seguimos firmes, serenos, fuertes y aunque la violencia de desgracias tan injustas que hemos vivido han podido minar un poco nuestra moral, seguimos conjurandonos con el escudo de la alegría y la espada del buen humor, para aceptar que siempre después de una tempestad sobreviene una preciosa calma; como pasó la madrugada que nos dejaste.
Sabes que mamá va mejorando poco a poco. Ha sido un año muy duro con su operación, la quimio , la radio y después la isquemia que le dio debido a la tensión que casi se nos muere. Ha sido valiente ha luchado un año día a día, mostrando a veces su sonrisa debilitada y las marcas de su enfermedad. Pero no podíamos esperar otra cosa de una luchadora nata como ha sido ella toda la vida.
Sé mejor que nadie lo que ha sufrido, cuanto ha pasado, como le han flaqueado las fuerzas...pero siempre ha caminado hacia adelante, siempre levantando la cabeza y buscando un aire fresco que le devolviera la esperanza. A pesar que para colmo su hermana, tu madrina Chari, se nos fuera al cielo así de repente y esto ha sido otro mazazo tremendo para todos, pero para ella muy especial.
Pero ahí está, con su niño Paquiro contándole sus cosas, haciéndole sus mimos . A veces creo que este perro sabe perfectamente cuando debe darle el cariño que mamá necesita y cuando debe hacer las travesuras para que ella se ria, aunque también a veces este perro es un pequeño gran cabrón.
Lo importante es que mamá avanza y avanza bien y eso ya para mi y para todos es una felicidad que nos tiene más tranquilos.
De tu hermano J. Ramón que decirte, cada vez mejor con Nieves que es ya una hija más en la familia (ya ves él que tenía asegurado el carnet de solterón). Trabajando mucho como siempre y con sus cabreos con el Cádiz y sus broncas de vez en cuando con los politicos,, jajajaja.
Tu tío Popo mejorando día a día. Sabes que a pesar de sus limitaciones físicas esta muy bien cuidado, seguimos teniendo los enfados continuos por sus caprichos con las comidas, pero le damos coba los Domingos y le premiamos con su patatas fritas, huevos y jamón. Es como un niño grande y demasiado bien está para todo lo que le ha pasado.
De tu Anita que te cuento que ella no te cuente. Deseando estoy que venga ya el sábado y se quede este verano que tendré la suerte de estar en casa con ella después de muchísimos años. Ya es toda una mujer, aunque para mi siga siendo mi niña pequeña. Sigue con su dulzura, con su afán por superarse. Creo que le vendrá muy este año quedarse más tiempo aquí con nosotros sobre todo por Mama porque van a sus compras, se cuentas sus cosas, tu ya sabes...
Y por último que te digo de mi hijo. Quizás ha sido uno de los peores años en mucho tiempo. Lo he pasado muy mal con todo lo de tu madre. Me he sentido muy impotente y para colmo no me ha pillado en la mejor época. He tenido muchos problemas de trabajo, diferentes males familiares y problemas y desengaños que tu sabes han podido con mi corazón, no quiero enumerare los porqués que ya bien lo conoces tú, pero han sido tanto los golpes que me he llevado que aunque sabía que podía pasarme factura, no al nivel que ha sido.
Hoy hace justamente un mes que me dio ese infarto que casi me lleva con los pies por delante. Parece que lo que he siempre he dicho que el día que ingresará en un hospital era para no salir, casi se cumple, jajaja. Pero gracias a Dios y a los buenos médicos que me atendieron el domingo 23 de Junio consiguieron que llegara al hospital con vida y aquí ya mes que sigo intentando cada día volver ha ser el Opaito de siempre, aunque me da que tardaré un poquito en ponerme bien del todo porque aunque lo intento, mis fuerzas son muy limitadas.
Bueno hijo ya sabes que los médicos me tienen prohibido emocionarme y estresarme, es peligroso para mi y ahora mismo estoy en un punto que si me tomo la tensión seguro que ya mi arritmia aparece, así que mejor dejarlo aquí.
Sabes que siempre te llevo en mi pensamiento, en mi corazón, en mi vida.. como todos los que te quisimos, los que tuvimos el privilegio de compartir tu vida, los que aprendimos de ti que nunca hay que tirar la toalla por muy difícil que se nos ponga la vida. Y por eso lo hacemos.
Te quiero hijo, no tengo más palabras y a la vez tengo muchas, pero es tanta la emoción que me embarga que me da miedo pensar que el día que me dio el infarto, por un momento, desee morir para podre darte un abrazo.
Y eso cuando ves que estas vivo como gracias a Dios lo estoy (y espero por mucho tiempo) es muy fuerte de entender y sobre todo de explicar.
Sigue cuidando de todos nosotros hijo mio. Y en especial de mamá.
Un beso fuerte.